El dólar continúa su tendencia a la baja, alcanzando mínimos de seis semanas en medio de la creciente incertidumbre generada por la guerra comercial impulsada por la administración del presidente Donald Trump.
A pesar de la recuperación de los mercados de renta variable tras las amenazas arancelarias de Trump, el billete verde sigue debilitándose. Los próximos datos sobre fábricas y empleo podrían ofrecer nuevas señales sobre el impacto de la incertidumbre comercial en la economía estadounidense.
Uno de los factores clave en esta caída es la decisión de duplicar los aranceles sobre el acero y el aluminio importados, que pasarán del 25% al 50% a partir del miércoles. Esta medida coincide con el momento en que la administración Trump espera recibir nuevas ofertas en las negociaciones comerciales con otros países.
El índice dólar, que mide el desempeño de la moneda frente a una cesta de seis divisas, tocó las 98,58 unidades, su nivel más bajo desde finales de abril, antes de repuntar un 0,5%. Frente al yen japonés, el dólar subió un 0,26%, situándose en 143,075 yenes, mientras que el euro cayó un 0,44%, cotizando en 1,1392 dólares, tras haber alcanzado brevemente un máximo de seis semanas de 1,1454 dólares.
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En el contexto internacional, la inflación en la zona euro se desaceleró por debajo del objetivo del 2% fijado por el Banco Central Europeo, lo que refuerza las expectativas de un recorte de tasas de interés en los próximos días.
El desplome del dólar el lunes se produjo tras conocerse que el sector manufacturero estadounidense se contrajo por tercer mes consecutivo y que los proveedores enfrentaron retrasos en la entrega de productos debido a las restricciones arancelarias. La atención ahora se centra en los pedidos de fábrica y los datos de empleo que se publicarán a finales de la semana.
Según Francesco Pesole, estratega de ING, la evolución del comercio sigue siendo un factor crucial. «Los informes sugieren que China está ganando influencia sobre Estados Unidos a través de su control de las cadenas de suministro de chips y tierras raras», afirmó.
La incertidumbre comercial y las políticas arancelarias continúan afectando la confianza en el dólar, mientras los mercados esperan señales de estabilidad en la economía estadounidense.
Con información de Reuters.